Las Horas
Veo pasar las horas tirado en mi cama sin poder dormir, mis ojos clavados como puñales en mi corazón.
Miro dentro de mi para descubrir un enorme vacío. Es curioso: luchas por algo con todas tus fuerzas, te obsesionas con ello, y cuando lo consigues, no te queda nada.
Pasa otro minuto y en mi cabeza siguen sonando las canciones de aquellos que han sufrido mucho más que yo.
Y, de repente, lo comprendo.
Me doy cuenta de que sólo soy un bulto en mi cama que suda y que respira; un bulto que se mueve al ritmo de una obsesión.
Cierro entonces los ojos, y dejo pasar el tiempo.
Porque, a veces, el tiempo simplemente pasa.
Y yo sólo quiero hacerme mayor.
2 comentarios:
Jota, hay que disfrutar del veranito y dejarse de comerse tanto el coco!
No quieras hacerte mayor tan pronto. Está claro que ya no somos niños, pero hay que seguir disfrutando!
Un abrazo
Pero que perrera te ha entrado con hacerte mayor.
Aprovecha ahora los veintitantos que esos no vuelven, al igual que los treinta y tantos, etc...cada época tiene su momento y la tuya ahora es la de disfrutar y hacer un poco el loco. Créeme, ya tendrás tiempo de comerte la cabeza con "problemas de mayores".
Vamos ánimate y disfruta ahora de lo que tienes.
Un beso!
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